20) Crónica de un concierto anunciado (I)

Con la entrada comprada desde Diciembre solo era cuestión de horas para enrumbar hasta el concierto. Era la primera vez que compraba una entrada tan cara (210 soles con el descuento) para la zona E, la que seguía inmediatamente a la zona M, la más cercana al escenario. Pero valía el costo. Esta vez se tenia que apreciar más de cerca a la banda, no solo escucharlos sino también ver y confirmar el porque son considerados entre los mejores.

El concierto estaba programado para las 9 de la noche y seguramente empezaria puntual. Por eso la idea era estar dos horas antes, para llegar sin prisas y disfrutar la emoción previa. Llegué del trabajo a las 6 y 30, me cambie para estar listo. Baje a preparar un ron con gaseosa, pero al final salio un piscola que iba calentando los ánimos. Mi hermano ya estaba alistándose tambien cuando en esos momentos llego mi primo D, para acoplarse a la marcha del concierto. Venia del trabajo y nos dijo con pena que solo iba a poder pagar una entrada de reventa en tribuna. Aún estabamos por veinte de mes y era comprensible ahorrar un poco para no llegar apretado al día 30.

Nos servimos una ronda final, comentando los pormenores del trabajo y entonces sonó el teléfono. Era Rodrigo, mi otro primo tambien muy aficionado a la música que nos preguntaba si ibamos a ir al concierto y en que zona ibamos a estar. Le habia caido una entrada de regalo hace hora, y sabiendo que nos gustaba Metallica llamo para ver si coincidiamos en la zona y precisamente el boleto que tenia era para la zona E.

Ahora para estar completos faltaba convencer a mi primo D. de comprar el boleto en la misma zona que nosotros. No fue muy dificil porque tenia las ganas de ir y ahora ya tenia una excusa más. Quedaba entonces sacar la plata del cajero, ir hasta el estadio, buscar la reventa y jugarsela para que la entrada sea buena y  pasar sin ningún problema.

Caminamos hasta la avenida, primero a Metro para llegar al cajero. Grupos de gente con polos de metallica estaban reunidos conversando animadamente, algunos comiendo algo, todos calentando para llegar con la motivación al tope al estadio. Ya eran las ocho y qunce de la noche y había que apurar el paso. Por la Avenida Universitara con Amezaga, llegamos hasta la curva donde se ya distinguía claramente la cola de la Zona A. Inmediatamente buscamos el boleto de reventa. Lo conseguimos a 230 (dentro del estadio un pata nos dateo que lo estaban rematando a 150) pero no importo mucho. El boleto era bueno y pudimos todos como lo habiamos planeado.

Quince minutos para las nueve, llegamos a la entrada de la zona E, hasta el final de la reja que delimitaba la cola. Al parecer todos ya habíán ingresado y solo fue una formalidad caminar hasta el último lugar para ingresar. Antes de ingresar nos encontramos con otro amigo que estaba vendiendo polos desde temprano y ya nos habia separado dos. En pleno avance nos sacamos las camisas,  y con el polo del concierto puesto ya estabamos completos. Ya solo nos quedaba llegar hasta la cancha y disfrutar del espectáculo.

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